El presidente de EE. UU., Joe Biden anunció este martes nuevas sanciones contra Moscú tras la decisión del presidente ruso Vladimir Putin de reconocer a dos regiones en Ucrania como territorios separatistas, en su propósito, afirmó, de justificar “la toma de más territorio por la fuerza”.
“Este es el comienzo de la invasión de Ucrania por Rusia”, afirmó Biden en una comparecencia de prensa desde la Casa Blanca, en referencia al envío de tropas rusas a las regiones de Donetsk y Lugansk.
Biden mantuvo el mensaje de que EE. UU. y sus aliados de la OTAN han enviado durante un mes a Moscú sobre la necesidad de encontrar una solución diplomática de la crisis, sin embargo, dejó en claro su compromiso con la alianza militar. “Seguimos pensando que Rusia tiene la intención de avanzar aún más y de lanzar un ataque masivo contra Ucrania”, denunció.
“No hay duda de que el agresor es Rusia”, aseguró Biden en referencia al avance de las tropas rusas hacia territorio de Ucrania, una vía opuesta a los llamados que ha hecho la OTAN para desescalar la tensión provocada por la agrupación de más de 160.000 efectivos militares que Putin ha llevado a las fronteras de la vecina nación.
Decisión rusa
El Consejo de la Federación —la Cámara Alta del Parlamento de Rusia— aprobó unánimemente este martes el uso de tropas rusas en el extranjero.
“Las Fuerzas Armadas de Rusia deben usarse «sobre la base de los principios y normas generalmente reconocidos del derecho internacional», señala el documento sancionado.
«El número total de formaciones de las Fuerzas Armadas de la Federación de Rusia, sus áreas de operación, sus tareas, el período de estadía fuera del territorio […] se determinan por el presidente de la Federación de Rusia de acuerdo con la Constitución», indica el decreto, solicitado por el mandatario.
Comentando la votación, la presidenta de la cámara, Valentina Matvienko, indicó que el uso de las tropas rusas tendría como objetivo «establecer la paz en el Donbass, […] detener esta sangrienta guerra civil, evitar más bombardeos de asentamientos pacíficos, civiles, crear condiciones normales para la vida de las personas y garantizar la seguridad».
Según la ley, el Consejo de la Federación debe aprobar el uso de las Fuerzas Armadas en el extranjero, aunque a partir de 2009 el Ejecutivo puede hacer uso directo de las tropas «para la protección de los ciudadanos rusos contra una agresión armada». La Cámara Alta del Parlamento ruso votó por una medida similar en 2014, en el contexto del inicio del conflicto civil ucraniano, y en 2015, cuando las tropas rusas fueron enviadas a Siria.
Este lunes, Putin informó durante un mensaje a la nación de su decisión de «reconocer de inmediato la independencia y la soberanía» de las Repúblicas Populares de Donetsk y Lugansk. Tras finalizar su discurso, Putin ordenó al Ministerio de Defensa que garantice el mantenimiento de la paz por parte de las Fuerzas Armadas rusas en ambas repúblicas populares.
El viceministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Andréi Rudenko, declaró este martes que Rusia por ahora no tiene planes para enviar sus tropas al territorio de las Repúblicas Populares de Donetsk y Lugansk, agregando que la decisión al respecto se tomará sobre la base de las amenazas existentes.