El Ministerio de Cultura, a través de una resolución firmada por la viceministra de Patrimonio Cultural, Mariela Sonaly Tuesta Altamirano declaró Patrimonio Cultural de la Nación al memorial “El Ojo que Llora” de propiedad de la Asociación Civil Caminos de la Memoria. En éste espacio están consignados los nombres de miles de víctimas de la violencia que azotó el país entre los años 1980 al 2000.
De acuerdo a los considerandos de la norma publicada hoy martes, el memorial “El Ojo que Llora” presenta los valores histórico, artístico e intelectual descritos en los artículos II y III del Título Preliminar de la Ley N° 28296, Ley General del Patrimonio Cultural de la Nación y modificatorias. Estos son:
- Valor histórico, al constituir una obra de dominio público que permite a nuestra ciudadanía meditar y reflexionar sobre el periodo histórico de violencia ocurrida en nuestro país entre las décadas de 1980 y 2000, marcando un punto de inflexión sobre los cambios sociales y poblacionales que afectaron a los peruanos en todo el territorio nacional.
- Valor artístico, en tanto el memorial antes referido es una obra de arte interactiva creada por una de las más importantes artistas de la escultura contemporánea peruana, inspirada en la magnífica tradición artística de trabajo en piedra; como un exponente de la memoria, la identidad y el arte, merece ser adecuadamente conservado.
- Valor intelectual, al constituirse como un espacio simbólico de disputa entre el pasado y el presente, y de reflexión sobre las demandas de las personas afectadas por la violencia en todos sus ámbitos. Bajo esta premisa, el citado bien puede convertirse en eje articulador de encuentros, intercambios y memorias, siendo el reflejo de una sociedad democrática y respetuosa de los derechos humanos.
Habiéndose pronunciado favorablemente los órganos técnicos competentes, resulta procedente la declaratoria como Patrimonio Cultural de la Nación del memorial “El Ojo que Llora”, advirtiéndose que los informes técnicos citados precedentemente, constituyen partes integrantes de la presente resolución”, señala la norma.
Foto: Facebook
Antecedentes
La Política Nacional de Cultura, aprobada por el Decreto Supremo N° 009-2020-MC, señala entre los factores históricos que explican el ejercicio de los derechos culturales, a los legados del post conflicto, entendidos como periodos de extrema violencia, entre los cuales figura el ocurrido entre los años 1980 y 2000 en todo el territorio nacional, que ocasionó la pérdida de miles de vidas.
En cuanto al aprovechamiento sostenible del patrimonio cultural, la Política Nacional de Cultura funciona como soporte físico y simbólico de las memorias, posibilitando que los individuos o colectivos adquieran conciencia acerca de su identidad, en la medida de que es un factor del sentimiento de continuidad y de coherencia en su reconstrucción de sí mismos.
Los memoriales son espacios públicos en los que se conmemoran eventos del pasado y se realizan debates, con el objetivo de evocar, recordar, conocer, analizar y reconocer la historia y promover la construcción de las memorias.
En general, corresponde al Estado peruano contribuir a generar y mantener espacios en los que se promuevan estos debates, y, en particular, promover y garantizar la protección, conservación y preservación de los bienes culturales alrededor de los que dichos debates se producen, por ser elementos de identificación colectiva.
Este espacio consignada los nombres de miles de víctimas de la violencia que azotó el país entre los años 1980 al 2000 (Foto: Facebook El Ojo que llora).
El complejo
El complejo laberíntico del memorial es un área con diseño de once círculos formados por gruesas bandas de cantos rodados, en los que se encuentran escritos los nombres, edades y el año de la muerte o desaparición de las personas inscritas en el Registro Único de Víctimas, creado mediante la Ley N° 28592.
Se trata de “un espacio que convoca y acoge no solamente a los familiares de estas víctimas, sino también a otros ciudadanos, provenientes de todas las regiones del país, así como a distintos colectivos de la sociedad civil dedicados a la construcción de memorias y estudiantes e investigadores de nuestra historia reciente”.
La autora de la obra, Lía Rosalía Anna María Vermeulen, Lika Mutal, ha sido distinguida como Personalidad Meritoria de la Cultura en ocasión de la conmemoración del Día Internacional de la Mujer en el año 2015, por su valioso aporte a las artes plásticas peruanas, de acuerdo a la Resolución Ministerial N° 074-2015-MC.