El presidente de Italia, Sergio Mattarella, disolvió el Parlamento y convocó a elecciones anticipadas para el 25 de septiembre, luego de la renuncia del primer ministro Mario Draghi y sostener una reunión con el presidente del Senado y de la Cámara de Diputados.
Hasta que se conforme el nuevo Gobierno, las actuales autoridades que dimitieron continuarán en funciones para atender diversos asuntos en el país europeo.
Draghi presentó su renuncia como primer ministro tras perder la mayoría parlamentaria de la coalición de unidad nacional que lideraba desde febrero de 2021.
Durante una moción de confianza realizada en el Senado, el miércoles, sus principales socios en la coalición de unidad nacional le retiraron su apoyo, la Forza Italia, la Liga Norte, y el Movimiento 5 Estrellas (M5S).
Este es el mensaje del presidente de la República, Sergio Mattarella, luego de firmar el decreto de disolución de las Cámaras para convocar a nuevas elecciones en el plazo de setenta días señalado por la Constitución.
Palacio del Quirinal
Como se comunicó oficialmente, firmé el decreto de disolución de las Cámaras para convocar a nuevas elecciones en el plazo de setenta días señalado por la Constitución.
La disolución anticipada del Parlamento es siempre la última opción, especialmente si, como en este período, hay muchas obligaciones importantes ante las Cámaras que cumplir en interés de nuestro país. Pero la situación política que se ha presentado ha llevado a esta decisión.
La discusión, la votación y las modalidades con las que se expresó ayer este voto en el Senado dejaron en evidencia la falta de respaldo parlamentario al gobierno y la ausencia de perspectivas para la creación de una nueva mayoría. Esta condición hizo inevitable la disolución anticipada de las Cámaras.
El gobierno ha presentado su dimisión. Al tomar nota de esto, agradecí al Primer Ministro Mario Draghi ya los Ministros por sus esfuerzos en estos dieciocho meses.
Es sabido que el Gobierno, con la disolución de las Cámaras y la convocatoria de nuevas elecciones, encuentra limitaciones en su actividad. Sin embargo, tiene las herramientas para intervenir sobre las necesidades presentes y sobre las que surgirán en los meses que van desde la decisión de hoy hasta la instalación del nuevo gobierno que será determinado por el voto de los electores.
Tengo el deber de subrayar que el período que atravesamos no permite pausas en las intervenciones imprescindibles para contrarrestar los efectos de la crisis económica y social y, en particular, del aumento de la inflación que, provocada sobre todo por el coste de los productos energéticos y alimentarios, tiene graves consecuencias para las familias y las empresas.
Intervenciones imprescindibles, por tanto, para hacer frente a las dificultades económicas y sus repercusiones sociales, especialmente en lo que respecta a nuestros conciudadanos en condiciones más débiles. Esencial para contener los efectos de la guerra de Rusia contra Ucrania en el nivel de seguridad de Europa y de nuestro país. Indispensable para la cada vez más necesaria colaboración a nivel europeo e internacional.
Estas necesidades van acompañadas -con decisiva importancia- de la puesta en marcha en los plazos acordados del Plan Nacional de Recuperación y Resiliencia, al que se condicionan los necesarios y sustanciales fondos europeos de apoyo.
Tampoco se puede ignorar el deber de seguir combatiendo la pandemia, que aún se encuentra peligrosamente extendida.
Por estas razones, espero que -a pesar de la intensa, ya veces aguda, dialéctica de la campaña electoral- haya una contribución constructiva por parte de todos, en cuanto a los aspectos que he señalado; en el mejor interés de Italia.
Periodista, con experiencia en el manejo de medios de comunicación masivos, respaldados por 31 años consecutivos de ejercicio periodístico en Radioprogramas del Perú, RPP (donde ejerció cargos jefaturales desde 1995 hasta el 2013) y siete años como director del periódico digital Agenda País.