Rusia llora la muerte de trece personas en una escuela pública a manos de un pistolero, que luego de cometer el crimen se quitó la vida.
Sucedió este lunes en Izhevsk, una ciudad situada al pie de los Urales, a 960 kilómetros al este de Moscú, en una escuela donde estudian alrededor de un millar de alumnos menores de 11 años. Tras el tiroteo, el centro escolar fue evacuado y la zona, acordonada.
El Comité de Instrucción ruso informó a través de Twitter que según datos preliminares, el crimen acabó con la vida de trece personas, seis adultos y siete niños. Otros 14 menores y 7 adultos resultaron heridos.
Imágenes difundidas por medios rusos muestran que en los cargadores de las armas se puede leer la palabra «odio» escrita con tinta roja
El ataque se ha producido unos pocos días después de cumplirse el primer aniversario de un tiroteo similar en el campus de la Universidad de Perm, también en los Urales, en él que murieron seis personas y 24 resultaron heridas el 20 de septiembre de 2021.