La fiesta proyectada de centenares de hinchas peruanos residentes en Madrid convocados para el tradicional banderazo en el frontis del hotel de concentración de la selección peruana a pocas horas de su encuentro amistoso contra Marruecos, quedó ensombrecida por una inexplicable gresca entre policías españoles y jugadores.
Hubo empujones, golpes, varazos, gritos e insultos, en general un inusual descontrol, tanto de agentes de la Policía española como de los jugadores de la selección nacional. “Queríamos saludar a la gente y nos empiezan a meter puñete”, se escuchó decir a Pedro Gallese, capitán del equipo peruano acusado por uno de los efectivos policiales de haberle agredido con un golpe en la vista.
¿Como se originaron los hechos?
Todo sucedió en el momento de la llegada de la selección peruana al hotel NH Collection Eurobuilding luego de entrenar en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas.
Cuando los jugadores ingresaban al hotel, en medio del gentío, policías españoles destinados a prestar seguridad al cuadro nacional, procedieron a arrebatar banderolas y carteles a hinchas peruanos.
Uno de estas banderolas arrojada por el agente cayó frente al técnico Juan Reynoso, quien intuitivamente recoge el material.
Hubo gritos de protesta de los hinchas peruanos.
Ante el excesivo celo policíal, Yoshimar Yotún y Pedro Gallese piden calma a la hinchada.
Los policías españoles, en lugar de apoyarlos, empujan a los peruanos, probablemente en un intento de hacerlos retroceder y evitar el contacto con los hinchas, lo que provoca la reacción de casi toda la delegación peruana.
A partir de este momento, todo es confusión. Gallese, Yotun, Carvallo, Valera, Peña, Lapadula y otros jugadores reclamaron a los policías en medio de empujones.
Nuevos gritos se escuchan en la multitud; destaca una voz, al parecer dirigida a los policías españoles: “¡Tranquilos, tranquilos, son jugadores!”.
Luego, en el interior del hotel, Carlos Zambrano se enfrentó con uno de los policías.
La situación no llegó a mayores debido a la intervención de varios de sus compañeros-
Una vez retornada la calma, Yotún, Valera, Carvallo y Gallese, acudieron a la comisaria para rendir su declaración testimonial.
El último en abandonar la sede policial fue el golero nacional.
Minutos después, el Consulado General del Perú en Madrid informó que Pedro Gallese se retiró (se estima a las 5:00 a.m. hora española) de la comisaría donde prestó declaraciones, sin cargos.
Este capítulo extradeportivo se presentó a sólo horas del enfrentamiento de Perú con Marruecos en el estadio Metropolitano.
Tras los sucesos, la FPF emitió un comunicado en el que lamenta lo ocurrido y se pone a disposición de los organismos de control internos y externos para ayuda a esclarecer lo sucedido.