Franz Beckenbauer y Mario Zagallo, fallecieron, cada uno rodeado de los suyos
Franz Beckenbauer. “Con profunda tristeza anunciamos que mi marido y nuestro padre, Franz Beckenbauer, falleció pacíficamente mientras dormía ayer domingo, rodeado de su familia”, con estas palabras la familia del exfutbolista alemán Franz Beckenbauer anunció el fallecimiento de uno de los mejores jugadores de fútbol de todos los tiempos.
Beckenbauer había padecido en años recientes de varios quebrantos de salud. Junto al brasileño Mario Zagallo, además del francés Didier Deschamps, han ganado la Copa del Mundo como jugador y como entrenador. En 1974, “Der Kaiser” (o “El Empera como era apodado, se coronó campeón con Alemania Occidental, repitiendo la hazaña como entrenador 16 años después en el Mundial de Italia en 1990.
El exjugador nacido en Giesling el 11 de septiembre de 1945 se le atribuye la creación de la posición del líbero o barrendero en las alineaciones del fútbol moderno, que él masterizó, al posicionarse ligeramente adelante de la línea de defensa, interceptando cualquier balón que atravesara por su zona.
Después de una amplia carrera como jugador y entrenador, Beckenbauer se convirtió en presidente del club FC Bayern donde debutó a los 13 años. Beckenbauer también celebró un gran triunfo cuando llevó el Mundial de 2006 a Alemania. Vea videos colgados en la página web de la FIFA:
Beckenbauer, tocado por los escándalos
En su vida no estuvo ajeno a escándalos por presuntas irregularidades financieras en su condición de dirigente del fútbol mundial.
En el 2016, el Comité Independiente de Ética de la FIFA archivó la causa en su contra por presuntas irregularidades financieras en la concesión a Alemania de la organización del Mundial 2006.
La FIFA concluyó que Beckenbauer, máximo responsable del Mundial 2006, y los exdirigentes de la federación alemana (DFB) Zwanziger y Schmidt habían violado la normativa anticorrupción debido a un pago de 10 millones de francos suizos (unos 9 millones de euros) realizado por el comité organizador a Mohamed bin Hammam en 2002.
«Este pago estaba vinculado a la aprobación de una contribución financiera de 250 millones de francos suizos asignados y pagados por la FIFA al comité organizador del Mundial de Alemania entre 2002 y 2006», señaló la FIFA en su resolución.
Los investigadores creen que ese dinero fue una devolución oculta vía FIFA al entonces presidente ejecutivo de Adidas, Robert Louis-Dreyfus. En 2002, una suma similar fue transferida de una cuenta del presidente del comité organizador, el propio Beckenbauer, y de su mánager de entonces a una cuenta en Catar de una de las empresas de Mohamed Bin Hammam, suspendido de por vida por la FIFA por cargos de corrupción. Lo que ocurrió con ese dinero todavía se desconoce.
Al calcular los plazos de prescripción relativos a este caso, el Comité de Ética ha dictaminado que el inicio de dicho plazo no debía empezar a contar en 2006, cuando se celebró el Mundial, sino años antes, concretamente en el «momento preciso de la conducta de cada implicado».
«En consecuencia, el órgano jurisdiccional dictaminó que el plazo de prescripción correspondiente expiró en 2012 en el caso del Sr. Beckenbauer y en 2015 en los casos de Sr. Zwanziger y el Sr. Schmidt, lo que implica que su conducta ya no puede ser perseguida de conformidad con el artículo 12 del Código Ético de la FIFA», argumentó el organismo.
Mario Zaagallo
Mario Zagallo, el único hombre que recibió cuatro medallas de campeón de la Copa Mundial de la FIFA, falleció a los 92 años. Había ingresado en un hospital de Río de Janeiro a finales de diciembre. Zagallo no se había puesto la camiseta de Brasil hasta un mes antes de que comenzara Suecia 1958, pero fue titular en todos los partidos que conquistaron este deporte por primera vez. El delantero extremo jugó un papel clave para que retuvieran la corona cuatro años después en Chile.
Brasil estaba en crisis en el período anterior a México 1970. Setenta y cinco días antes de que comenzara, se apresuró a nombrar a Zagallo como entrenador a instancias de Pelé. El Alagoano eligió valientemente cinco números 10 (Gerson, Jairzinho, Rivellino, Pelé y Tostao) en el mismo equipo, operando a la mayoría de ellos en funciones desconocidas.
Dio sus frutos mientras el equipo se regocijaba en su camino hacia la gloria. Zagallo fue entonces asistente de Carlos Alberto Parreira cuando la Seleçción ganó Estados Unidos 1994, antes de volver a ocupar el banquillo y llevarla al subcampeonato en Francia 1998.
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«Con gran tristeza nos enteramos del fallecimiento de uno de los verdaderos grandes, un hombre cuyo impacto en la Copa Mundial de la FIFA no tiene paralelo», comento el presidente de la FIFA, Gianni Infantino.
