Elecciones en EE.UU.: candidatos, en tanto, se preparan para el primer debate del 10 de setiembre
Elecciones en EE.UU. La batalla de 2024 por la presidencia de Estados Unidos entre el expresidente Donald Trump y la vicepresidente Kamala Harris entró en una etapa decisiva.
Las campañas de los democráticas y los republicanos enfilan todas sus fuerzas hacia los seis estados indecisos que definirán la elección: Pensilvania, Michigan, Wisconsin, Arizona, Georgia y Nevada.
Kamala Harris y Donad Trump en cambio ultiman los detalles de lo que será el primer debate de los candidatos a la Casa Blanca programado para el 10 de setiembre y que tendrás como presentadores a David Muir y Linsey Davis. Vea el especial de la Voz de América.
Los últimos movimientos de los candidatos
Kamala Harris afirmó en un mitin realizado en Arizona: Hace dos años, nuestra administración honró nuestra más sagrada obligación de cuidar a nuestros veteranos firmando la Ley PACT en ley—la expansión más significativa de beneficios y servicios para los veteranos expuestos a toxinas en más de 30 años.

Luego, la vicepresidente Harris se tomó un momento para dirigirse a los manifestantes antiisraelíes que interrumpieron su manifestación en Arizona: “Respeto sus voces. Respeto sus voces, pero estamos aquí para hablar sobre esta carrera en 2024″.
La interrupción se produjo unos cinco minutos después del discurso de Harris ante un auditorio repleto en el Desert Diamond Arena, en las afueras de Phoenix, y la respuesta de la mujer de 59 años a los manifestantes marcó un sorprendente cambio de táctica respecto de su enfoque en Michigan el jueves, donde cerró y regañó a los manifestantes antiisraelíes.

Donald Trump
La campaña de Donald Trump sufrió la violación de un pirata informático, aparentemente extranjero con lo que obtuvo acceso a sus comunicaciones internas, según el portavoz de la campaña de Trump, Steven Cheung, quien confirmó que algunas de sus comunicaciones internas habían sido hackeadas.
El medio especializado Político informó que recibió a finales de julio correos electrónicos de una cuenta anónima con documentos aparentemente de la campaña de Trump. Los documentos recibidos contenían lo que parecía ser “comunicaciones internas de un alto funcionario de la campaña de Trump”, según el medio.

También recibieron una investigación que aparentemente la campaña había realizado sobre el compañero de fórmula de Trump, el senador de Ohio, JD Vance. El documento estaba fechado el 23 de febrero.
“Estos documentos se obtuvieron ilegalmente de fuentes extranjeras hostiles a Estados Unidos, con la intención de interferir en las elecciones de 2024 y sembrar el caos en todo nuestro proceso”, declaró Cheung.

El portavoz de la campaña de Trump hizo referencia a un informe de Microsoft, sobre el Gobierno de Irán para influir en las elecciones presidenciales que se realizarán en noviembre próximo en Estados Unidos.
Deportación masiva
“¡Deportación masiva ahora!”, decían los carteles en la Convención Nacional Republicana, dando así un respaldo total a la promesa de Donald Trump de expulsar a millones de inmigrantes en el mayor programa de deportación de la historia estadounidense.
Sin embargo, algunos republicanos no están del todo preparados para eso.
Lauren B. Peña, activista republicana de Texas, dijo que escuchar los llamados de Trump a las deportaciones masivas, así como los términos como “ilegales” e “invasión” que se usaron en la convención, la hizo sentir incómoda. Al igual que algunos republicanos en el Congreso que han propuesto enfoques equilibrados sobre la inmigración, ella espera que Trump sólo esté fanfarroneando.

“No tiene intención de ir a deportar a cada familia que cruce la frontera, quiere decir deportar a los criminales y a los agresores sexuales”, dijo Peña.
Pero Trump y sus asesores tienen otros planes. El expresidente está poniendo la inmigración en el centro de su campaña para recuperar la Casa Blanca y está empujando al Partido Republicano hacia una estrategia que se remonta a la década de 1950, cuando el expresidente Dwight D. Eisenhower lanzó una política de deportación conocida por un insulto racial: “Operación Espalda Mojada”.