Casi un mes después de su anuncio oficial, Kylian Mbappé tuvo su primer contacto con la hinchada de Real Madrid. El futbolista francés fue presentado en el Santiago Bernabéu ante un mar de ovaciones. Con 25 años de edad, jugará fuera de su país, en el club que confesó ser hincha desde pequeño.
Emulando casi todos los detalles de lo que fue la presentación de Cristiano Ronaldo en 2009, Mbappé hizo notar que llegó a un lugar que siempre quiso. Además, lució el dorsal que portará para esta temporada.
«Voy a dar la vida por este club. Estoy muy feliz y orgulloso de ser un jugador del club de mis sueños y del club más grande», agregó en buen español el delantero que firmó oficialmente su contrato por cinco temporadas con el presidente del Real Madrid, Florentino Pérez.
La presentación de Kylian Mbappé
«Es un día increíble para mí, desde que soy un niño tenía un sueño, de jugar aquí, y estar aquí significa mucho para mí (…) Ahora tengo otro sueño, es de estar a la altura de este club, el mejor del mundo», subrayó el jugador, que ya vestía el uniforme blanco con el número 9 en la camiseta.
Acompañado por sus padres que lo observaban desde el público, Mbappé se mostró emocionado cuando los 80.000 espectadores en el Bernabéu corearon su nombre, y en un momento dado besó la camiseta del club.
También participó en la ceremonia Zinédine Zidane, quien fuera jugador y luego entrenador del cuadro merengue, y quien, en diciembre 2012, invitó a un adolescente Mbappé junto a toda su familia a visitar las instalaciones del club madrileño.
Kylian Mbappé llegó a Real Madrid
Los nuevos compañeros de Mbappé empezaron a entrenar este lunes, pero el delantero francés gozará de unos días más de descanso. Para el nuevo «Galáctico», la ceremonia de este martes selló un traspaso largamente esperado.
Procedente del París Saint-Germain, Mbappé llega a España después de una Eurocopa decepcionante a nivel individual, y donde su imagen de estrella quedó eclipsada por la joven revelación española Lamine Yamal.
El capitán de la selección francesa, de 25 años, vivió una última temporada difícil en el PSG, marcada por la tensión que rodeó a su negativa a renovar contrato, tras cuya finalización y fichaje por el Real Madrid dijo sentirse «liberado» y «aliviado».